Buenos días!
¿Qué tal todo? Yo como siempre, a tope, pero con
una sonrisa en la cara SIEMPRE! ¿y vosotros?
Estamos en un mes regalos por excelencia, y no
es navidad, no! Pero todos tenemos un padre o un José, Josefa, Pepe o Pepa, Mª José,…
al que regalarle.
Me gustaría aprovechar este mes, en el que la mayoría
regalamos cosas a otra persona, para hablaros del “arte” de regalar, si amigos,
regalar es un arte, hacer un buen regalo requiere interés, imaginación, tiempo,…
Pero no solo es importante saber regalar, también es necesario saber como recibir
un regalo. Tengo una amiga que da igual lo que le regales, cuando lo hagas y
quien se lo haga, jamás abre los regalos… ¡Error! Siempre, como signo de
gratitud, se abren los regalos recibidos, y se agradecen! (a no ser que seáis
japoneses, que en tal caso, vuestra cultura dice lo contrario…) Y si al
abrirlos, lo acompañamos de, la tan nombrada por mi, SONRISA, mejor que mejor!
Los regalos podemos hacer por dos motivos: por
un compromiso social (boda, cumpleaños, bautizos,…) o por “gusto” (día de los
enamorados, aniversarios,…). Estos últimos los llamo “por gusto”, porque no
existe obligación de regalar, el regalo es un detalle que le pone la guinda al
día en sí.
La mayoría de veces, el regalo actúa como espejo
de nuestras intenciones, de ahí que deba ser un gesto amable, sincero y
desinteresado.
Cuando hacemos un regalo, los factores que lo
rodean: forma de presentarlo, envoltorio, momento escogido para entregarlo,… a
veces son más importantes que el regalo en sí, y le da un valor añadido al
mismo.
Ya sabéis, no todo es gastarse mucho dinero en
el regalo, así que os animo a pensar en el regalo con cariño para conseguir
sorprender al agasajado de una forma original con mucho cariño.
Os deseo que paséis un feliz día de San José y
que tanto si regaláis o si sois agasajados, lo hagáis correctamente!
Ya sabéis que podéis pedirme que hable de un
tema concreto que os interese.
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